domingo, 10 de junio de 2012

¡¡Comenzamos la Eurocopa!!

Estamos a una hora sólo de que España comience su andadura europea y ya estoy de mala leche. ¡Cesc de falso 9! ¿En serio? O sea, tienes a Llorente (¡¡jugadorazo!!), Torres y Negredo (con lo pesados que habéis sido con llevarlos) y METES A FÁBREGAS DE FALSO 9 QUE NO HA JUGADO LA PREPARACIÓN. Muy bien marqués, muy bien. Espero que el culé haga el partido de su vida porque si no verás tú qué risas...

Pero bueno, no voy a entrar en polémicas tan pronto. Hoy, y aunque hay jugadores que NO ME GUSTAN EN ABSOLUTO en la Selección, voy a animar a España y os daré mis razones:

Porque aunque Piqué, Xavi, Cesc, Valdés, Busquets y Pedro no me gusten en absoluto, especialmente por sus ideas la mayoría de ellos, y de hecho, me caen mal, ellos no me representan pero llevan un color que sí lo hace: EL ROJO (eso sí, jamás dudaré de la calidad de Xavi, todo hay que decirlo)

Porque a pesar de las pifiadas del marqués, hoy juega la SELECCIÓN ESPAÑOLA, ese equipo que aunque a más de uno le escueza, es la selección de nuestro país, ese país que repudian el resto del año.

Porque si he madrugado para ver cómo en Corea nos robaban el mundial gracias a un egipcio que tiempo más tarde afirmó que ese fue el mejor partido que jamás ha pitado, si he llorado cuando caímos ante Francia en otro mundial y he aguantado a muchos franceses y francoparlantes las mofas y risas estando en Malta por ello, si he sufrido la tanda de penaltis ante Italia, el mano a mano con Robben y he aplaudido los triunfos de mi selección, si he estado en lo bueno, en lo malo y en lo peor, lo siento pero yo ahora no me bajo del carro.

Porque el sentimiento por mi país es más fuerte que mi rechazo hacia ciertos personajes.

Porque soy española y me tira mi tierra, y la luzco con orgullo tanto dentro como fuera de las fronteras.

Porque aunque seguramente y gracias a ese odio que crece cada vez más entre ciertos rivales ya no celebre algunos goles y jugadas como antaño, sigo creyendo en el sueño europeo.

Porque aunque también simpatice con Portugal y Alemania, mis colores siempre serán el rojo y el amarillo. Nací española, crecí española y moriré española.

Porque como dice el lema de este año: NO HAY DOS SIN TRES.

¡Vamos ESPAÑA! ¡Que se note de qué pasta estamos hechos!

Comenzamos nuestra andadura hacia el sueño del triplete...

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