
Mou celebrando el que es ya su séptima liga, en diez temporadas en cuatro países distintos.
Anoche, y como hace cuatro años, Higuaín, el gran Pipita, ese que siempre aparece como en un segundo plano, abrió la lata para cantar alirón en territorio hostil. Yo dije que apostaba por Benzema y por Gonzalo, y no me equivoqué demasiado. Mou sacó al argentino gran parte del partido (¡Pipita, qué bueno que viniste!) y luego lo cambió por Karim. No voy a entrar en discusiones de quién es mejor. Para mí los dos son muy buenos y no puedo elegir. Tampoco entraré en si debe irse o quedarse. Conforme se vayan viendo los rumores y fichajes, hablaré. Por ahora sólo puedo decir que si se queda le seguiré apoyando, y si se va, sus motivos tendrá y me dará pena, pero así es el fútbol.

Pipita Higuaín celebrando su tanto, el primero de la noche, que abriría la lata del campeón.
Futbolísticamente hablando, fue un partido sensacional, donde el Madrid dominó y el Bilbao no se rindió. Un partido de esos que gustan, que tiene ocasiones para ambos pero no llegó a ser un partido loco y que desquicia. Fue un partido bonito, con diversas obras de arte. Pero como siempre, hay varias notas negativas:
La primera es la afición "ejemplar" en San Mamés. Sabíamos que no seríamos bien recibidos, y que no garantizaban la seguridad del madridista. A mí me daría vergüenza que tuvieran que sacar a varios aficionados blancos por el mero hecho de llevar otra camiseta para evitar percances. Sí, señores, eso ocurrió anoche (lo vi en un especial después del partido en Telemadrid, si mal no recuerdo). Varios aficionados merengues tuvieron que abandonar el estadio antes de finalizar el partido porque varios aficionados del Bilbao les estaban increpando. Afición ejemplar.
Pero no sólo eso. Anoche se acordaron de Florentino y su negativa a ceder el Bernabéu para la final de Copa del Rey. Creo que aún no se dan cuenta que a nuestra casa invitamos a quien queremos, como hacen ellos. ¿Cuántas veces ha jugado España allí? Pues eso. Seamos sinceros: ni obras, ni baños ni leches en vinagre. No queremos ni al FCB ni al ATH en el Bernabéu porque no nos tragan y nosotros no les tragamos. Y para tener que aguantar a esos dos, que encima pitarán el himno de España, ver cómo juegan en nuestra casa y que se monte la batalla campal de hace años, pues mejor que escojan otro sitio. Querían el Bernabéu por el tema de la capacidad. Se les niega, y escogen el Calderón. Claro, que la Cartuja de Sevilla no tiene más capacidad que el Calderón, ¿no? Pues la casa rojiblanca tiene 54.600 aproximadamente y la Cartuja de Sevilla 57.600. Es decir, 3000 más. Si lo que les preocupaba era la capacidad, ¿por qué eligen el que está a orillas del Manzanares? ¿Por qué no el Mestalla que tiene unas 500 localidades más? Por una razón muy sencilla. Porque allí no está LA CIBELES. Y eso es así. Que a mí no me engañáis.
Además de todo eso, los más que acostumbrados (lamentablemente) cánticos a CR7, y no sólo al luso, o al Madrid, sino a todo el país. "Españoles hijos de puta" cantaban unos aficionados (y no sólo cuatro, que retumbó toda "la Catedral") que, si miran su DNI, podrán comprobar que ellos también son españoles. Afición ejemplar.
A mí me parece perfecto que apoyen a su equipo, pero no que insulten a un país, y encima, si éste es el suyo. Por supuesto, ni que decir tienen los objetos que tiraron al campo. Y ahora diréis, "y de corte de mangas de CR7 no dices nada". La butifarra del luso estuvo mal. Es cierto. Cristiano no debería haber hecho ese feo gesto. También os digo, si yo fuera él y en todos lados se acordaran de mi madre y la ligaran al oficio más antiguo del mundo llegaría un momento que me cabrearía y respondería como Cristiano, señalando el escudo y diciendo "sí, sí, pero somos campeones". Si para más inri se acerca un jugador del rival contrario y me dice "no celebres tanto que yo soy campeón del mundo y tú no", normal que a Cristiano le toque las narices, pero ya no por lo que dice, sino por el mero hecho de decirlo. ¿A cuento de qué va Javi Martínez a PROVOCAR al luso? Es que mucho criticar y atizar al de Madeira, pero nadie menciona al español. Creo que con ese gesto de Javi, su posible fichaje por el club blanco está más lejos.
Aún así, y a pesar de estos detalles, hubo otros que me gustaron, como cuando Callejón le protesta una acción al árbitro y Casillas le manda relajarse y callar. Así sí, Capitán. O cuando Íker abronca a sus compañeros con razón. O los abrazos de Mou en los cambios, el manteo del entrenador, el cariño mostrado por la afición blanca... Ahora muchos intentarán subirse al carro, pero yo desde luego sé quién ha estado siempre y quién no, así que a mí no me la dan.
Para terminar, quisiera dar las gracias a Mou, que tanto nos ha dado; a los jugadores, a TODOS los jugadores, porque todos han hecho esto posible; y a la afición, pero a la de verdad, a la que ha apoyado en lo bueno, en lo malo y en lo peor. GRACIAS. Hoy soy un poquito más feliz.
Os dejo con unas imágenes para deleite vuestro. ¡A DISFRUTAR DE ESTA LIGA TAN MERECIDA!

Afición merengue en San Mamés.

Locura.

Alirón.

Manteo.

¡¡¡GRACIAS!!!

¡¡¡MUCHAS GRACIAS!!!

El mal rollito se palpa en el vestuario de los CAMPEONES ^^,

¡¡GRANDES!!
¡HALA MADRID!
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