Las distancias se acortan pero mi confianza crece

Noche calentita en Madrid. Partido de los difíciles y, como ya anuncié, ante un rival que saldría a darlo todo. Pero una vez, y sé que lo que no seáis de mi pensamiento diréis que siempre lloramos y decimos lo mismo, el protagonista fue quien menos debía serlo. Sí señores, otra vez, pésima actuación del árbitro.

Si vistéis el partido, veríais que se equivocó en contra de ambos equipos, que no pitó un penalti sobre Jordi Alba, que Pepe cuando le hicieron falta y fue Arbeloa a levantarle dio una patada y puede parecer que hubiera un poco de cuento (tengo mis dudas porque en un momento hace un gesto raro como si de verdad le doliera), pero también hubo faltas y penaltis no pitadas a favor del Madrid (falta sobre CR7 al borde del área, por ejemplo), entradas duras no pitadas... aunque para mí, la imagen del partido no es el enzarzamiento de Soldado con Marcelo, sino la AGRESIÓN entre dos y sin el balón en juego a Di María. El jugador recibe una dura entrada, está en el suelo, se va a levantar y un jugador del Violencia como yo ya lo llamo intenta coger el balón y empuja a DiMa, DiMa se intenta levantar y otro jugador del Violencia le agarra del cuello y la cabeza y lo tira hacia atrás. Y todo esto sin ser pitado ni sancionado. Después de eso, ¿qué más quieres que te dé?

En cuanto a fútbol, fue un partido de calidad. El Valencia nos plantó cara (ya podrían jugar todos los equipos con los mismos coj*** frente a otros como juegan frente a nosotros) y se vivió una noche de fútbol como las de antaño. A Mou no le reprocho nada de la alineación porque para mí fue un gran once, sacando artillería pesada y yendo a por todas. Casillas, otra vez el Santo, hizo su papel y volvió a lo que siempre ha sido, el salvador. Pero es de esas noches que el esférico no quiere entrar y no entra. Ocasiones tuvimos un montón, Benzema, Cristiano, Di María... pero bien el destino que le gusta ponernos en las adversidades o bien la mala fortuna que le gusta aparecer en el momento menos indicado hicieron que el partido acabara en tablas.

Ahora, que es cuando más se han recortado las distancias. Ahora que es cuando el equipo más nos necesita. Ahora, que hasta los de otros equipos ven que aquí hay cierta mano negra. Ahora es cuando se muestran las verdaderas caras. Mi confianza en mi equipo crece. Y anoche, el Bernabéu fue un hervidero. Anoche sí hubo ese jugador 12 que tantas veces reclamo. Por fin la afición se hizo oír durante todo el partido. Por fin la afición dejó las pipas a un lado para centrarse en el equipo. Pero siempre hay algún "pseudo" que califica a la alineación de ayer de "equipucho" y dice que "hemos tirado el partido". Si meter al terreno de juego de inicio a gente como Cristiano, Benzema, Özil, Higuaín, Xabi Alonso, Pepe... es tirar el partido, "señor", creo que usted y yo no somos del mismo equipo y creo que ayer no vimos lo mismo.

Ahora es cuando más alto y más claro yo grito ¡HALA MADRID! Porque ahora es cuando hay que dar el empujón, ahora que el carro va cuesta arriba y necesita del esfuerzo de todos. Ahora y no cuando vengan días gloriosos. Ahora y no cuando todo va sobre ruedas.

Así que pseudos, piperos y toda demás calaña que osan dar la espalda al que se supone que es el equipo de sus amores, váyanse por donde han venido. No les necesitamos. Si no confían ahora en nuestros chicos, ¿cuándo lo harán? ¿Cuando ganen? ¿Cuando goleen? ¿Cuando todo vaya genial? Eso no es apoyo, es OPORTUNISMO. Y el oportunismo NO NOS VALE.

Así que, o estáis con nosotros, o estáis contra nosotros, por muy radical que suene. Pero es que aquí, en el madridismo parece que todo vale, y no. Basta ya de subirse al carro cuando el viento es favorable. Basta ya de ser veletas. ¡Basta ya!

Pseudomadridistas en mi vida, no gracias. Podéis iros por donde habéis venido.

@LuluKellogs